No hace mucho
No hace mucho tiempo que empecé a masticar el sabor de estar solo..
Hoy vuelven de nuevo las sensaciones de la primavera y de aquellas vueltas a casa, solo a las tantas de la madrugada, pensando en qué será la próxima. La próxima vez o la próxima persona que conozca.
No hace mucho que he empezado a conocer gente que por fin se mueven en círculos diametralmente opuestos a los que me estaba moviendo. A fin de cuentas siempre han sido los sentidos que yo debí haber seguido pero yo, como buen salmón, fui a contracorriente la mayor parte de mi vida..
Pasé entonces por todas las carreras relacionadas con la medicina y sus derivados. Hasta el punto de que un día, borracho de tristeza y triste en mi borrachera, me juré al volver a casa que nunca más alguien relacionado con venas, arterias o sangre. Ni medicina, ni enfermería, ni biología.. Al final me quedé con la sensación de que la poca gente que tengo el placer de conocer (más o menos a fondo) son todas del ámbito de la sangre. Difícil propósito, pero como diría Enrique “he decidido un mecanismo de defensa, presa como está mi alma y con la calma suficiente: ser más fuerte y enfrentarme cuanto antes a la verdad. Y sin dudar un segundo lo asumí”.
No hace mucho me paseaba por Pamplona mirando parejitas recibiendo entre besos y abrazos a la primavera. Pensaba que tal vez fuera éste precisamente el momento adecuado para tratar de llevar a cabo mi estrategia. Hasta que llegó el día en que tarde o temprano tendría que caer..
No hace mucho tiempo preparaba yo la cena a algunos comensales mientras mi equipo jugaba en la tele. Ciertamente no hice caso al partido pero si sin embargo a una conversación que mantuve con una chica, pícara y ardiente, de brillante barriguita y con mejores ojos, mientras el Sir despotricaba contra algunos de los jugadores del equipo rival. Fue entonces la sensación de la primavera al volver a casa..
No hace mucho estaba yo sentado en los fosos de ésta maravillosa ciudad viendo como atardecía mientras pensaba en todo esto..
No hace mucho..
Buena Suerte y Hasta Luego
Posted on 00:30 by E and filed under | 1 Comments »
Hoy vuelven de nuevo las sensaciones de la primavera y de aquellas vueltas a casa, solo a las tantas de la madrugada, pensando en qué será la próxima. La próxima vez o la próxima persona que conozca.
No hace mucho que he empezado a conocer gente que por fin se mueven en círculos diametralmente opuestos a los que me estaba moviendo. A fin de cuentas siempre han sido los sentidos que yo debí haber seguido pero yo, como buen salmón, fui a contracorriente la mayor parte de mi vida..
Pasé entonces por todas las carreras relacionadas con la medicina y sus derivados. Hasta el punto de que un día, borracho de tristeza y triste en mi borrachera, me juré al volver a casa que nunca más alguien relacionado con venas, arterias o sangre. Ni medicina, ni enfermería, ni biología.. Al final me quedé con la sensación de que la poca gente que tengo el placer de conocer (más o menos a fondo) son todas del ámbito de la sangre. Difícil propósito, pero como diría Enrique “he decidido un mecanismo de defensa, presa como está mi alma y con la calma suficiente: ser más fuerte y enfrentarme cuanto antes a la verdad. Y sin dudar un segundo lo asumí”.
No hace mucho me paseaba por Pamplona mirando parejitas recibiendo entre besos y abrazos a la primavera. Pensaba que tal vez fuera éste precisamente el momento adecuado para tratar de llevar a cabo mi estrategia. Hasta que llegó el día en que tarde o temprano tendría que caer..
No hace mucho tiempo preparaba yo la cena a algunos comensales mientras mi equipo jugaba en la tele. Ciertamente no hice caso al partido pero si sin embargo a una conversación que mantuve con una chica, pícara y ardiente, de brillante barriguita y con mejores ojos, mientras el Sir despotricaba contra algunos de los jugadores del equipo rival. Fue entonces la sensación de la primavera al volver a casa..
No hace mucho estaba yo sentado en los fosos de ésta maravillosa ciudad viendo como atardecía mientras pensaba en todo esto..
No hace mucho..
Buena Suerte y Hasta Luego
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1 comentarios:
Siento lo que escribes.
Una vez alguien me dijo, o quizas lo leí, no se, una frase que decia algo como que observar la vida desde el prisma de la felicidad compartida es una excusa barata para no encarar la vida como es, sin mas pretensiones, a pelo. Cuantas veces me he rebelado contra esa molesta sensación de sentir que no es suficiente solo contigo misma, que por mucho que intentes repetirte que te bastas para ser feliz y que no puedes sentirte insatisfecha, mira lo que tienes no lo que te falta, al final el hueco de lo negado se hace insondable y angustia...
Y en fin, la primavera ayuda a resaltar las luces y las sombras, y al volver sola a casa de madrugada ya no hace frio pero tu intuyes otro frio mas intenso calando en los huesos.
Pero en fin txikillo, la felicidad facil nunca tiene grandeza. Yo seguiré aprendiendo a sentirme viva cada dia, incluso cuando de mucha pereza.
Y mientras tanto...ya lo ves...seguiremos esperando...
Un beso ;)
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