Sociabilidad pamplonesa (y otros)

Seguro que más de un@ al leer el título se ha frotado las manos..
Creo que ya no merece la pena hablar sobre lo desagradables que pueden resultar el 99% de las muchachas de ésta gloriosa ciudad. No porque no tenga razones, ni datos, ni argumentos para hacerlo, sino porque últimamente me he llevado alguna que otra sorpresa que fue realmente gratificante.
El machito del eje del mal me dijo un día que de ir a un antro de perversión (aquel día marengo) debía aguantar hasta la hora del cierre porque es en ese momento cuando inexplicablemente casi todos los presentes empiezan a participar en una especie de macro festival de besos, caricias y demás ‘visajadas’..
Evidentemente dudo que cualquiera de ellos llegara a ‘copular’ dado que suponiendo y dando por supuesto (y explicado en meses anteriores) que las mozas de Pamplona son hipercerradas, superpijas y rematadamente superoseas es por definición que ninguno de ellos llegara a saciar su hambre esa misma noche.
"En Pamplona no se folla" –es la frase que repite todo pamplonés al explicar éstos hechos cuando sale de la geografía Navarra..
Marengo es el sitio perfecto para noches perdidas.
Recuerdo haberle hecho caso al nene del eje del mal y recuerdo pensar, cuando yo mismo lo presencié con mis propios ojos, que tenía razón. Es un aspecto de la sociología de Pamplona que yo nunca había estudiado dado que ese sitio, ese antro, siempre fue de un desagrado exquisito a mis oídos.
No.. evidentemente no estoy hablando de haberlo probado porque como sabréis mi Mala Suerte y mi 'timidez social' siempre me impidió avanzar más allá de un par de preguntas en una conversación con alguien que no conozco.. Pero sí que hablo de noches y noches en compañía de dos rompehielos y de un hombre de ideas. Era entonces cuando la fauna (ellos) (los oputxianos) y la flora (ellas) se juntaban en una simbiosis casi perfecta al acercarse las horas de cierre en un íntimo baile casi reproductivo-animal en el que por una vez eran ellas quienes se acercaban a ellos..
Ahora bien.. llegado éste punto y sacadas ciertas conclusiones tras el descubrimiento de marengo como el lugar más descriptivo de la ‘sociabilidad pamplonesa’, me pregunto cuáles serán las nuevas sensaciones que me dará el lugar de los vaivenes y cómo llegaré a realizar un fallo distinto al que años atrás llevo realizando.
Hay quien dice que los vaivenes es ‘una plantación de nabos’..
será que el uno es de nabos y el otro una colonia de mejillones y almejitas?

Buena Suerte y Hasta Luego
PD: ..y.. por qué siempre fuimos al lugar de los vaivenes?
Posted on 00:00 by E and filed under | 3 Comments »

3 comentarios:

Anónimo dijo... @ 09:19

He de decir, no en defensa de las chicas de Pamplona (que se defiendan ellas) si no en contra de los pamploneses, que tambien es muy dificil hablar con cualquier tio de la ciudad.
Despues de haber salido varias noches, he estado en situaciones en las que los tios de cualquier otro punto de la geografia mundial hubieran aprovechado.
Es de entender por vuestra falta de experiencia debido a vuestra 'timidez social'.
Conclusion, la culpa es vuestra por no atreveros (y aprender con la practica) pues en Pamplona, las chicas aun esperan que seais los tios los que os lanceis.

Anónimo dijo... @ 15:10

Vaiven es un "campo de nabos" y muy bueno respecto a tus almejitas yt mejillones, me he reido mucho con tu post.

guitarboy dijo... @ 09:13

... si sólo fuera lo de follar aún es un mal menor; pero, lo de no tener tema de conversación es muy penoso.. aunque hay excepciones eh xDD..