Está bien, hablemos.
Realmente tenía ganas de que nos sentáramos a hablar.
Y las tenía porque creo que tienes muchas cosas que explicarme.
Me pregunto por qué te has llevado el verde para regarlo de un pálido y gris invierno, para camuflarno entre negras esperanzas de futuro y para hundir las de mantener el legado de todo lo que pasó.
Puestos a aspirar a algo, entre tanta cultura para años venideros, a lo que aspiramos es a dejar cuatro rincones más o menos intactos y un puñado de baldosas que se van quebrando conforme las pisamos.
Me pregunto cuando camino, nos preguntamos, hasta cuando este borrón y estas cicatrices. Hasta cuando seguir sintiendo esa esperanza ennegrecida, hasta cuando podremos volar en el verde de nuestros jardines.
Yo anhelo caminar por la calle y sentirla como propia, como mi calle. Pero es que cuando camino, no veo mas que vaches más o menos camuflados, no veo más que eso, cicatrices que nos hemos más o menos autoimpuesto sin otro chiste que contar que el del lobo, pero al final resultó que sin verlo ni olerlo, zas! apareció el lobo y nos comió.
Y ahora qué?
Pues ahora toca recrearnos todos en nuestra propia mierda, la que nosotros hemos querido y hasta hemos votado!, y a tratar de asimilar más o menos bien el legado de lo que nos has dado con tu mal trabajo y mal mantenimiento de un rincón tan precioso de este mundo.
Pero es que no contenta con todo esto, con pisarnos el cesped, con prender dos cohetes, con quitarnos nuestros adoquines y hasta de pintárnoslos de negro, no tienes ningún remordimiento en decir que encima quieres ser ni más ni menos que la presidenta de todos los navarros?
...

Buena Suerte y Hasta Luego