Una vez escuché a Andrés decir porque no le gustaba que le dijeran muchas cosas. Él no ve como hecho ‘agradable’ y ‘de buena educación’ el que un amig@ le de las gracias, le pida perdón o le diga ‘lo siento’. Y tenía razón.
Hoy me han dado las gracias una vez más. La verdad es que quien lo ha hecho no tiene la culpa porque hace tanto tiempo que no hablo con ella que dudo que pueda incluso intuir que no me gusta que me digan ésas cosas.
Soy, como Andrés, de los que piensa que los verdaderos amigos no tienen porque decirme ‘gracias’, porque a decir verdad es algo probado y fácilmente imaginable que con lo que me soportáis tod@s os deba (de deber, de desear hacer) hacer favores o deciros algo bonito o dar palabras de aliento cuando realmente lo necesitáis..
Por eso cada vez que un@ de vosotr@s me decís una de esas tres cosas me sorprendo y me hace pensar.. y siempre respondo con una frase que conocéis:
No me digas ‘gracias’, ni me pidas perdón ni me digas ‘lo siento’
Y quiero que éste comentario de hoy sirva para eso. Para que no me lo digáis, porque reconoceréis, como yo, que no hay mejore cosa que hacerle un favor a un amig@ y no recibir un ‘gracias’, porque sabe bien, porque es como si ya se lo esperara de ti y no le hace falta decir nada.. porque resulta bonita esa mirada sin palabras..
Sí, tal vez sea eso..
Sí.. sólo una mirada..
Pero siempre seguís diciendo las tres palabras. Os lo explique en castellano, árabe o anglosajón; parece que os de igual.. Pero lo que no sabéis es que a mi también me da igual que me las digáis, porque cada vez que os digo ‘mi frase’, cada vez que me preguntáis “pero por qué no quieres que te diga nada de eso?” y os explico los porqués me siento más cercano a vosotr@s..
Y no hay nada mejor para un amigo que sentirse cerca de la otra mitad de la amistad.

Buena Suerte y Hasta Luego